Según la Real Academia Española, un grupo (de pertenencia) es un grupo social al que se adscribe un individuo por compartir comportamientos, valoraciones, creencias, etc. Aún así hay muchos puntos de vista del que definirlos; podemos hacerlo de acuerdo a la interacción de sus miembros, a la identificación que tienen éstos con una categoría social determinada,…
La clasificación de los grupos se resume en el siguiente cuadro (Urbano, Claudio A.; Yuni, José (2003): El trabajo grupal en las instituciones educativas: herramientas para su análisis. Ed Brujas):
- Según al grado de influencia que ejercen los procesos de socialización (Charles H. Cooley, 1909):
- Según el grado de identificación que logran los individuos del grupo (Merton, 1956):
- Según sean los procesos de integración:
LOS HARDCORIANOS :
Se trata de un grupo secundario, voluntario y de pertenencia. Sus miembros comparten el gusto por un mismo estilo musical, el hardcore, que dentro de la música electrónica en general, se caracteriza por su dureza. Asimismo, comparten un mismo punto de vista sobre la vida, de ahí la utilización de la frase “It's not only about the music, it's about the lifestyle” (“No es sólo la música, es un estilo de vida”). Se podría decir que existen dos tipos de estatus: en un primer escalón, encontramos a los deejays, que son aquellos que producen y mezclan la música en las discotecas. Son admirados por todos los demás miembros de este grupo, es decir, los seguidores, que formarían parte del segundo escalón, y que sienten una especie de “adoración” por los primeros, pues poseen el poder de hacerles bailar en las discotecas.
Los roles de este grupo son comunes a todos los miembros, en el sentido de que los propios deejays llegan a sentir la misma sensación con otros miembros de su estatus al escuchar cómo mezclan la música. Los seguidores, sin embargo, pueden acceder al primer escalón si consiguen llegar a un nivel de “calidad” como deejay, logrando reunir a multitud de seguidores. Podríamos decir, que el tener más o menos seguidores aporta al líder/deejay de mayor o menor estatus, a pesar de pertenecer al primer escalón.
De los seguidores, se espera que acudan en masa a las discotecas, festivales o ‘raves’ (que son fiestas ilegales), así como que interactúen en foros de internet.
Las normas de este grupo se refieren en gran parte al modo en que visten , se comportan y, muy importante, en la manera en la que decoran sus coches. Podemos ver en los enlaces algunos ejemplos. En cuanto a la comunicación, utilizan numerosas frases que propician el “hermanamiento” entre ellos. También es destacable la manera en la que se reúnen, en torno a coches con equipos de música mejorados, para bailar esta música de una manera exagerada, tal y como podemos ver en este vídeo.
En publicidad encontramos ejemplos de la utilización de este grupo como estereotipo:
Y si recordamos, en el programa Buenafuente, surgió el “Neng” que representaba muy bien todo lo que hemos dicho anteriormente:
Este grupo podríamos dividirlo en aspectos generales en dos, los que se acaban comprando un instrumento y lo tocan y los que solamente escuchan este género musical.
Siguiendo con ejemplos de estos grupos en publicidad:
METALEROS O METALHEADS
Los metaleros son un grupo secundario, de pertenencia y voluntario. Son personas aficionadas a la música metal, género que surgió a finales de los setenta y principios de los ochenta, extendiéndose por todo el mundo diversificándose tanto cultural como musicalmente.
Este término engloba también a los seguidores de los distintos subgéneros como el heavy metal, death metal, black metal, thrash metal… aunque a veces tengan sus propias denominaciones.
El metal no es una identidad cultural uniforme, sino que incluye diversos estilos y tendencias no siempre acordes entre sí, donde las diferencias musicales e ideológicas suelen ser a menudo muy marcadas.
Cuando hablamos de grupos nos referimos a un conjunto de personas que interactúan entre ellas de acuerdo a ciertos patrones establecidos y tienen una identidad común, en este caso los miembros tienen en común el gusto por una música concreta, el metal, una forma de vestir común variando los estilos en función de los subgrupos de este género, y su apariencia conlleva desde el pelo largo, chaquetas de cuero, abalorios de plata hasta botas militares, predominando siempre el color negro.
Dentro del estatus en este grupo, se reconoce en primer lugar como líderes a los grupos musicales de gran relevancia como Metallica, Slayer, Megadeth y Anthrax que han creado modas entre los seguidores y en segundo lugar las personas que más conocen sobre la música y cultura metal.
Los grandes metaleros adoptan un rol muy estricto en cuanto a la originalidad de su cultura, los problemas más comunes a la hora de diferenciar al auténtico metalero son el tipo de subgénero que se escucha, la ideología, el comportamiento social, el atuendo y la pertenencia grupal.
Las normas de este grupo se basan en seguir la música metal como si de una religión propia se tratara, llevar una vestimenta concreta y seguir su ideología.
Destacar que las mujeres metaleras, llevan ropa como la de los hombres pero adaptada a su cuerpo, es decir, chaquetas de cuero entalladas, pantalones ceñidos y pelo largo normalmente teñido de negro y suelen tener una preferencia musical dentro del género mucho más suave.
Siguiendo con ejemplos de estos grupos en publicidad:
LOS PIJOS
Grupos como estos podemos encontrarlos en Facebook, la red social por excelencia.
Aquí el grupo al que se están refiriendo es a los llamados “pijos”. Se trata de un grupo secundario, que puede ser de pertenencia o de referencia, y voluntarios o involuntarios. Esto tiene una explicación. Y es que la concepción de una persona pija es tan ambigua que nos puede costar incluso clasificarlos.
Según el estatus que tienen, podemos llamar pijos a aquellas personas adineradas, con un nivel de vida mayor al de la media, lo que les da esos valores de muchas veces superioridad por tener mayor nivel adquisitivo. Aún así, esto no siempre es así, pues muchas veces se le pueden atribuir valores negativos, como el ser niños de papá que tienen la vida solucionada, que no saben decidir por ellos mismo, y que a pesar de su dinero carecen de inteligencia.
Sin embargo, otra forma de verlos no es sólo por su dinero, si no también por su vestimenta. En un primer momento se les llama pijos a las personas que llevan ropa de marca, pero eso depende más de la manera en que los lleven. Suelen diferenciarse, físicamente, por su corte de pelo, los complementos que llevan y sobre todo por su forma de hablar, “ósea tía, es divino”.
Podemos decir que son de pertenencia si nos referimos a personas que han nacido en una familia adinerada y por eso se les clasifica así, o por gente que intenta integrarse en el grupo vistiendo de esa manera, por ejemplo, serían de referencia. En cuanto a si son voluntarios o involuntarios es por la misma razón, si has nacido en una familia rica involuntariamente perteneces a ese grupo, si lo que intentas es ser como ellos es voluntario. Aquí podemos entonces hablar de los “falsos pijos”.
En cuanto al título del grupo, vemos como al hablar de ellos la gente les está asociando directamente a la ropa cara (Prada). Como se espera de ellos que usen ropa de marca por el simple hecho de ser “pijos” (expectativas de rol), de manera que cada persona que compre algo caro será considerado como tal.
Este estereotipo es muy utilizado en la publicidad. Los “pijos” siempre tendrán dinero (no tiene porqué ser así, como hemos dicho antes) y lo malgastarán, tendrán un deje muy pronunciado a la forma de hablar y se les diferenciará fácilmente por su físico. Algunos ejemplos son las campañas de Burguer King y de Adsl.
